Llegó de nuevo el último viernes de mayo y como es tradicional celebramos el acto de graduación de segundo de bachillerato del IES Sierra de Mijas en el teatro de Las Lagunas.
El ritual es el mismo de todos los años y sin embargo todos los años es diferente: los chicos con chaqueta y corbata, las chicas con vestido de fiesta. Cambian los colores, cambian las modas, pero cada año vemos las mismas sonrisas nerviosas, los gestos de emoción contenida de los familiares que intentan disimular, sin conseguirlo, el orgullo de ver a sus hijos rodeados de compañeros, de profesores, de todo lo que hasta ahora ha sido el mundo del instituto, que han seguido a través de tutores, de notas, de comentarios felices o indignados de los que, hasta hoy, eran alumnos de secundaria y a partir de mañana serán futuros universitarios.
Todo se ha preparado y medido al milímetro (gracias Ana, gracias Juan Antonio): las flores, la iluminación, los alumnos de primero de bachillerato que ayudan a organizar el acto y que observan como parte del staff la ceremonia que protagonizarán dentro de un año... Y empezamos:
Paco Zafra, el director del instituto, como siempre abre el acto y saluda a la comunidad educativa, esa que suele aparecer en los documentos y que hoy está aquí, hecha madres, padres, hermanos, profesores, ayuntamiento y barrio. El discurso es breve, como será breve también el de Pilar Jiménez, presidenta del AMPA, que este año es también madre de una de nuestras graduandas.
Hay ocho personas a las que los discursos de Paco y Pilar, pese a su corta duración, les parecen eternos, son los que ahora van pronunciar el discurso que cada curso ha elaborado. Aquí reproducimos el de 2ºBto A, produnciado por Isabel y Paula, y el de 2ºBto B, que, como veis en la foto, estuvo a cargo de Zoe y Elena:
Tras la entrega de diplomas por parte de los tutores de cada curso terminó el acto de graduación de bachillerato.
Lo que caracteriza a la graduación de bachillerato del Sierra de Mijas es el ratito que después del acto pasamos en el instituto, hablando, picando algo, conociéndonos y reconociéndonos. Creo que este tiempo de encuentro es el que más disfrutan los alumnos y además permite a las familias disfrutar con sus hijos un ratito antes de que se vayan a la cena de graduación y a la discoteca... hasta que la noche aguante.
Momentos inolvidables:
Nadia cantando tras la cena taaannn bien que en la boda del otro salón le pidieron que por favor, cantara para los novios.
La pink limusina
Una madre infiltrada que entregó el diploma a su hija
Una "ayudita" que igualaba la altura ante los micrófonos...
Y muchos más, si quieres añadir el tuyo aquí tienes los comentarios... y siempre puedes participar como autor de este blog.
Un abrazo a todos
